Perspectivismo

'' Deberíamos ser como las abejas, laboriosas y primorosas, tomando el néctar de distintas flores para así, obtener el mejor. Deberíamos pues tomar los distintos aspectos de la vida, y las distintas formas de ver el mundo, para otorgarnos a nosotros mismos una más rica perspectiva''

Esta fue la conclusión de una entrada anterior que ocupó las humildes ''redes internáuticas'' de este blog. Y es que conforme voy estudiando y aprendiendo me doy cuenta de que la perspectiva es la mejor manera de llegar a tener un conocimiento del mundo y de lo que nos rodea. 

¿Debemos por ello buscar la forma de desperdiciar cualquier tipo de teoría que nos lleve al conocimiento? Pues en mi opinión si hay algo bueno que pueda ser tomado de unos y de otros podemos formar una nueva teoría. 

Ortega y Gasset es la abeja del siglo XX, el propuso nada más y nada menos que el Raciovitalismo, es decir, sí, de acuerdo, haremos una crítica al racionalismo empedernido y al vitalismo extremista, es más superaremos, todo eso, pero asimilaremos lo positivo que tiene el vitalismo y lo valioso de la correcta utilización de la razón. Es por eso que tomamos como primordial, siguiendo por supuesto la teoría de Ortega, como primera realidad la vida. La vida es el hecho más importante, el que justifica lo demás, la única realidad ''más patente'', la que tiene primacía ontológica y cronológica. La razón es secundaria, pero igualmente importante, la razón me ayuda a comprender esa realidad, me ayuda a darme cuenta de todo lo que la precede con primacía ontológica y cronológica. 

La vida es encontrarse, hacer nuestro camino, construirla, es posibilidad, libertad para elegir y hacerla proyecto, es problema, por supuesto, debemos elegir, y al elegir estamos intentando resolverla, es temporalidad, esta sumida en un tiempo histórico, es movimiento, es devenir, es observar, ser conscientes de que vivimos, de lo que hacemos y de las elecciones que tomamos para forjarla. 

El ''yo'' se forja por sí mismo y por sus circunstancias (''yo soy yo y mis circunstancias''), el ser humano para ello cambia, es razón histórica, vital, narrativa... Hereda las visiones históricas de sus antepasados y debe cuidar el no repetir los mismo errores... 

Pero sobre todo y lo más importante, para conocer la vida, debemos unir los puntos de vista, tolerar todas aquellas formas de ver la vida, de ver el mundo, la realidad... 

Por supuesto, señor Nietzsche, que hay que decir sí a la vida, ¿pero acaso eso implica el dejarse llevar por los instintos animales, es más, qué nos diferenciaría de una bestia que ataca por puros instintos? De hecho creo que si nos dejáramos llevar por el desenfreno, por las pasiones, por lo Dionisíaco, los animales nos superarían en civilización. 

El decir sí a la vida, no implica tener que acabar con la libertad y con las creencias del otro, el decir sí a la vida implica esa tolerancia que defiende Ortega en su perspectivismo, decir sí a la vida, conlleva una responsabilidad muy grande. 

Si hacemos caso de la formación, de lo importantes que son las circunstancias para ''crecer'' como personas, entonces debemos estar en una época privilegiada, una época en la que tenemos la suerte de tener ciertos privilegios. Dejándonos llevar por estas circunstancias y por los cambios que estamos sufriendo ahora, en todos los ámbitos, quizá deberíamos ''echar la vista atrás'' y transformarnos en razón histórica para poder aprender y no dejar que se cometan ciertos errores del pasado, no dejar que ocurran  catástrofes que tanto dolor, miseria, y terror implantaron en los corazones de nuestros antepasados. No creemos ideales de ''superhombres'' que se valen de fuerza para implantar su ''voluntad de poder'', pues para mí el superhombre es, aquel que valiéndose de su ingenio, inteligencia, y buen corazón se propone ser útil a la sociedad y aportar su grano de arena para que, esta sociedad cambie y vayamos todos hacia un mundo mejor, pues si como alguien me dijo una vez, nadie hace nada por nadie, esta vida sería el infierno en el que Jesucristo se habría suicidado sin poner su fe en el ser humano. Y ya los griegos (como siempre) se dieron cuenta de esto, de que debe existir cooperación entre los seres que formamos este mundo, y aunque no sea una gran narración, o el gran ejemplo que todos esperarían, Eliano ya quiso que Androcles y el León dieran un ejemplo de convivencia, y tolerancia capaz de enseñar a todos los seres humanos. No busquemos un Nihilismo innecesario, que solo sirve para crear discordia, para justificar la decadencia en que preferimos sumirnos en lugar de buscar soluciones afines a todos. La sociedad solo es decadente si el ser humano se empeña en que lo sea...