Cada hombre tiene un tesoro que lo está esperando
-Paulho Coelho-

viernes, 21 de junio de 2013

Flores de mi jardín

Hoy puedo decir que, tras una oleada de exámenes bastante considerable, llegó mi descanso y el de otros muchos. 
Si tengo que recordar la primera vez que entré por las puertas de la facultad, me da la risa. Estaba nerviosa, ansiosa por empezar a conocer gente y ver cómo era mi carrera, pero nerviosa. Por lo general todos queremos causar buena impresión cuando llegamos a un sitio que se nos antoja extraño, nuevo... un nuevo mundo. Pues hoy, viernes 21 de junio de 2013, ha terminado esa primera etapa. Ese primer año que con tantas ganar y nervios empecé. Y solo puedo decir que me siento la persona más feliz del mundo. He conocido a gente realmente maravillosa a la que ya quiero como si hubiera estado en mi vida desde siempre, y a las que ya estaban, las sigo queriendo igual o, incluso, más. He descubierto un mundo totalmente distinto. Siento que, en lo poquito que llevo en la Universidad, he crecido como persona y me siento llena y plena interiormente... por supuesto aún me queda mucho por aprender, mucho por crecer y conocer. Solo puedo decir que estoy preparada, deseosa porque empiece el año que viene y comenzar el nuevo año con fuerza y ganas. Lo único que puedo decir a todas esas personas que han hecho que mi paso por la universidad sea fascinante, es ¡gracias! Porque todos y todas sois unos amigos maravillosos, con algunos comparto más ideas que con otros... no me malinterpretéis, simplemente son maneras de pensar muy parecidas, y en general todos y todas me habéis aportado algo bonísimo. ¿Quién me iba a decir a mí que aquella chica con la que compartí estrés de Olimpiada y coche de vuelta para Jerez, se iba a convertir en una de mis mejores amigas?, ¿quién me iba a decir que me iba a estar tomando tés y echando unas risas con una chica rubia a la que conocí por casualidad en el tren?, ¿quién me iba a decir que sentándome al lado de unos chicos y preguntarles su nombre me iba a unir tanto a ellos, verdad María? En general, quién me iba a decir que todos íbamos a ser tan buenos amigos, que iba a estrechar tantos lazos... Mi primer paso por la facultad ha sido lo mejor que me ha pasado. Me queda mucho estrés, muchas buenas sensaciones, mucho que aprender... pero ahí estaré, ahí estaremos todos y todas para pasarlas juntos riéndonos a carcajadas en el tren.


Pero por supuesto a quién más se lo tengo que agradecer es a todas mis chicas, a las que veníamos juntitas del instituto, que me han hecho sentir mucho más arropada, con las que sigo compartiendo cosas muy especiales. Y aunque alguna esté pasando momentos más complicados debe saber que siempre estaremos ahí para apoyarla porque sabemos que todo le va a ir mejor, porque ya es hora de que todo te sonría, sabrá que me estoy refiriendo a ella. 
Todos y cada uno de vosotros me habéis enseñado y yo no puedo más que agradecéroslo. ¿Qué decir de mi carrera? Que me parece la más bonita, la más gratificante,




la más preciosas, la más maravillosa de todas las carreras que podía haber cursado en mi vida. Me esforzaré por aprender, por seguir amando lo que hago como lo amo, me fascina y me da muchísima satisfacción. ¡Gracias y muy feliz verano! 


lunes, 3 de junio de 2013

Mi vida entre libros...

Pues fue precisamente entre libros dónde encontré este maravilloso regalo de la poesía: El Jardín de las Hespérides. Como buena filóloga clásica, lo primero que me llamó la atención fue ese título tan mitológico, "hercueliano" y después el nombre de su autora; Encarna Pisonero.
Así que viendo el pequeño tesoro que había encontrado me lo traje a casa, lo "adopté" y, tras leerlo, le he dado un sitio privilegiado en mi estantería.
El libro es una maravilla, antiguo, con la portada, contraportada y páginas del interior amarillentas del uso y su avanzada edad. Es una edición de junio de 1984 con prólogo de Octavio Uña (al parecer un profesor de la Universidad Complutense de Madrid) y lo pública la editorial Torremozas (Madrid)
Después de estos datos técnicos, que no son del todo importantes, vamos a lo que verdaderamente le otorga una valía maravillosa y lo que a mí, bajo mi punto de vista, más me ha llamado la atención. Está compuesto por una serie de poemas dedicados, como es lógico, a la mitología y al mundo clásico, desde hermosos versos dedicados a Safo o Hipatia, hasta la figura de Penélope, Narciso o Aracne. Recomiendo encarecidamente su lectura, ya digo, que hablo desde mi punto de vista, aunque no son
versos que tengan una rima muy pegadiza e incluso sensual como un poema de Gustavo Adolfo Bécquer, son igual de hermosos. Sin duda alguna, una auténtica exquisitez para las tardes de tedio veraniego, y si no me creéis, comprobadlo vosotros mismos...


Tempus edax rerum

¿Acaso fue Saturno
el artesano de pies volantes y guadaña en la mano
quien te envió con el ceño fruncido
y el haz decrépito a sembrar destrucción?

Tiempo, inflexible,
arrebatando y rompiendo
te llevas lo mejor de todo cuanto existe.
Del hombre lo bello borras a tu paso
y ardor, vitalidad,
se van como los sueños.
Veloz pasa la arena
del tronco a mi vientre
y sabor a mar de mis párpados brota
sin consuelo.

Cómo esperar piedad
si de tus entrañas el fruto
devoras insaciable.