Cada hombre tiene un tesoro que lo está esperando
-Paulho Coelho-

miércoles, 13 de julio de 2011

La Verdadera Sonrisa de Mona Lisa

A veces una película deja mucho que desear. Otras, simplemente, sales del cine con ganas de matar al director/a. Algunas te hacen llorar a moco tendido, otras tantas te hacen sentirte tan emocionada que sales del cine llorando, y tres días después de haberla visto, sigues llorando, y otras... Te enseñan lo bueno de la vida. A mí me gustan esta clases de películas, esas que te enseñan algo increíble, que te muestran la historia de otras personas, reales o ficticias, y que te lanzan un mensaje de esperanza. He visto muchas de estas películas, un buen ejemplo es Invictus, dirigida por Clint Eastwood, y que relata la gran labor que hizo mi gran amigo Nelson Mandela, durante su mandato, para que el apartheid desapareciera no sólo de las vías legales, si no del corazón de los habitantes sudafricanos. En la piel de este gran hombre se metía el increíble actor Morgan Freeman. Otra que me impresionó mucho fue The Blind Side, protagonizada por Sandra Bullock y que narra la historia de una familia estadounidense que acoge a un chico de color que no tiene donde ir y que, con su ayuda, se convierte en un gran jugador de Fútbol Americano. Y así otras muchas películas que me fascinan, pero yo quería hablar de una película fascinante en todos los sentidos. Y no porque esté protagonizada por mi actriz favorita Julia Roberts, sino porque esta película hace ver las cosas de otro modo, una mujer que ha hecho lo que ha querido en su vida, que no se ha aferrado a normas o reglamentos machistas, ni a protocolos que preparan a las mujeres para ser, exclusivamente, la señora de su casa y la esclava de su marido. Una mujer que ha estudiado sin importarle las oposiciones, una mujer que se hizo profesora para transmitir cultura, una mujer que se encerró en una escuela para señoritas donde lo más importante eran las clases de protocolo. Le supuso una gran desilusión, ella una mujer que se preparó para no depender de nadie, sólo de ella misma, dando clases a jovencitas que dejarían la escuela en breve para dedicarse en cuerpo y alma a maridos que ni siquiera las mirarían y que todas la noches llegarían tarde porque tenían reuniones de trabajo muy importantes en la habitación de un hotel con otras mujeres. Sí, ese era el futuro deseado por esas chicas, aunque no todas eran así claro está, y por supuesto ella iba intentar hacer todo lo posible para que los sueños de futuro de esas chicas y sus aspiraciones cambiaran y fueran más altas. Recomiendo que se sienten a ver esta gran película porque no tiene desperdicio, una mujer adelantada, atrapada en un mundo de señoritas desesperadas por encontrar un marido y seguir el protocolo, dichoso protocolo...

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